sábado, 25 de febrero de 2012

Still alive for you, love

"Si usted es indispensable en mi vida", me dijo, por teléfono, antes de -yo- perder el teléfono y la conciencia. Sigo vivo por ella. A veces siento que hace ratos pude haberme ido. Lo he pensado muchas veces. ¿Para qué seguir? Sigo por ella.
No quiero que sienta lo que se siente perder a un hijo.
Quiero librarla de eso.
Si algo me ha quedado claro en esta vida que tengo es que es fácil deshacerse de ella. Lo podés hacer lento: con cigarros, alcohol, comidas indebidas (ay, el reflujo) o lo podés hacer rápido: desde el sexto piso, con la pistola de tu papá (tenía). También puede pasar por uno de esos "accidentes": que te roben el carro y te pongan una pistola en la cabeza, que tu avión "se escape" a caer, que un niño te trate de apuñalar en Río de Janeiro.
Pero hay que quedarse, hay que buscar una razón para quedarse.
Y cuando ella me dice "si usted es indispensable en mi vida", por teléfono, cuando ya estoy borracho, me doy cuenta de que -yo- ya encontré la mía.

1 comentario:

  1. Espero estes bien y hayas encontrado a la persona que te haga sentir bien. saludos

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